Parece mentira que estemos por hablar de una marca goleadora en Atlético y no vayamos a mencionar a Luis Rodríguez o a Juan Francisco Castro, dos de sus máximos goleadores históricos. Sin embargo, la marca de la que hablamos va más allá del gol en sí. La marca habla de lo que puede significar el gol y, en el caso de Guillermo Acosta, otro tucumano clave en la historia reciente del “Decano”, significa que Atlético no va a perder. Todo un presagio en la previa del partido de hoy a las 13.15 ante Defensa y Justicia por la segunda fecha de la Superliga.
¿Cómo es esto? Es más simple de lo que parece: cuando el “Bebé” Acosta hace un gol, Atlético no pierde. En la mayoría de los casos gana y, si no logra ganar, empata.
Si habláramos de un jugador con cinco goles, sería una mera casualidad, pero no es este el caso. Acosta tiene 24 con la camiseta de Atlético y en los 22 partidos en que los anotó (hizo dos dobletes), el equipo nunca perdió: 16 triunfos y seis empates, como recopila el periodista Silvio Maverino.
“Los goles siempre son algo especial. Por eso cuando los hago los grito bien fuerte”, le reconoce el volante ofensivo a LG Deportiva.
El lunes pasado, ante Racing, su racha corrió serio peligro: anotó tras un desvío pero era el descuento de un partido que Atlético perdía 0-2. Finalmente David Barbona salvó la racha del “Bebé” y Leandro Díaz casi que le suma una victoria más.
“Mi gol favorito fue el de la Copa Libertadores”, reconoce Acosta sobre su anteúltima conquista: el cabezazo ante Atlético Nacional de Medellín. Medir la importancia de ese gol para Atlético se hace difícil. Sobre todo si el equipo termina clasificando. Algo similar sucede con gran parte de sus tantos, ya que siempre sirven para cosas importantes. Para empezar -y por si fuera poco- para no perder.
“Uno siempre sueña que las cosas salgan bien en lo personal y en lo grupal”, dice Acosta, que combina ambas cosas: si a él le va bien, al equipo también.